Diez minutos de alto vuelo le alcanzaron a Instituto para sacar una ventaja que luego se hizo irremontable para Regatas, que aún no puede levantar cabeza. De la mano de Romano y de Elías, la Gloria fue surcando sus caminos en ataque para aumentar el goleo, al mismo tiempo que levantaba los ladrillos de la muralla en defensa, que impidieron a los dirigidos por Piccato plasmar su juego en el Sandrín.
Los dos jugadores mencionados fueron los principales artífices de la tercera victoria consecutiva para los de Victoriano. Nicolás terminó con 23 y 9 rebotes, alcanzando una media de 17,5 puntos y 12,5 tableros en lo que va de la competencia; mientras que Federico sigue demostrando que no llegó a Córdoba para calentar un lugar en el banco.
Fue de esos partidos que miden el carácter de cada uno. No significa que el ganador tenga más que el otro, pero sí muestran la entereza y la determinación de los equipos en situaciones críticas. Y esto fue lo que hizo hoy San Martín, con un triunfazo agónico, en la última bola, sobre un gran Riachuelo. Lo ganó Santi Ferreyra a 5 segundos del final, sellando el 67-65 definitivo para la segunda victoria del equipo en este Súper 20. Mucha personalidad para los de Diego Vadell. El base terminó con 9 puntos como una loable solución desde la banca e impidiendo que el juego entre en un suplementario. Gran partido de Javi Saiz y Matute Solanas (ambos con 12 puntos), en un San Martín que llegó a ganar por 13 de diferencia en el segundo cuarto, pero que tuvo que aguantar la reacción de Riachuelo. Aún así, la tarea defensiva del Santo fue clave durante media hora.
En la previa a este Súper 20, Ramella había dicho que el Súper 20 iba a servir como banco de prueba para el equipo, para testear cómo respondía este grupo de jóvenes talentosos que tiene en su plantel, pero que necesitaban dar un paso adelante. Y si bien apenas pasaron tres partidos, este arranque de 2 victorias sobre 3 presentaciones deja un buen sabor de boca para los marplatenses. Hoy fue 90-70 ante Argentino, con justamente uno de esos interesantes valores de figura: Carlos Buemo, que brilló como el líder ofensivo tras firmar 21 puntos (5/8 en triples). El santafesino fue el combustible de un Peñarol que sacó a relucir su mejor versión: dinámico, picante y prolijo cada vez que tocó la bola. Llegó a sacar +24 en un momento, y por eso el resultado no llamó la atención en un equipo que dominó al Turco. Nicolás Franco (10 puntos y 8 rebotes), Sansimoni (10 unidades y 3 asistencias), Thornton (13 puntos y 6 rebotes), Lockett (11 y 5), Monacchi (7 tantos), Valinotti (7 rebotes)… todo fue parte de un gran trabajo colectivo del equipo.
Fuente: LNB.
