El Celeste sumó su segunda derrota consecutiva en casa, ante un rival que estuvo certero y lastimó en momentos claves. Desde el inicio del juego, impuso condiciones y lideró el marcador en todo el desarrollo del partido. Si bien hubo una reacción de OTC, pero los errores individuales y colectivos no le permitieron quebrar a Ferro.
Los dirigidos por Fabio Demti no pudieron controlar la movilidad que impuso el rival, con Lezcano desde la base, lastimó en la zona pintada (con Tintorelli y Luchi) y cuando no lo hizo desde allí, encontró buenos lanzamientos externos en varias manos (Bettiga y Fierro) que fueron claves para siempre liderar el marcador.
La rotación en OTC no dio buenos resultados, si bien en varios momentos estuvo a un punto, no logró consolidar las levantadas y lo pagó caro.
El inicio del partido fue favorable para el visitante con Young (12 puntos) lastimando a larga y corta distancia, además del aporte de Castillo para sacar un 16-9 en cinco minutos. La Fusión mejoró con Basabe rompiendo hacia el canasto y un triple de Acevedo, Robinson apareció para empatar el primer segmento en 22. Young siguió encendido en Riachuelo, pero el banco de Quimsa rindió con Vasirani y Zezular para seguir prendido. Los santiagueños continuaron anotando con Vasirani y Gallizzi, pero Maldonado e Ibarguen estampaban el 45-40 para los Eternos.
Tras el entretiempo, Ibarguen facturó para que el equipo riojano intente escapar, pero la Fusión lo sostuvo con buenos pasajes de Brussino y Ramírez Barrios. Dos triples seguidos de Robinson, junto a Gallizzi cerca del aro, le dieron el liderazgo a los de Ramella por 65-57 con un cuarto por jugar.
Las bombas de Sansimoni y Rolfi ampliaron la brecha para el dueño de casa. Young intentó descontar, pero Quimsa siguió fino con Vasirani y Zezular. Triunfo santiagueño por 85-73 para conseguir su 16° victoria en fila por La Liga y seguir firme en la cima de la tabla.