Puerto Rico 62-63 España

Fue inexplicable. De dominar y mandar, a sufrir hasta el final. Tuvo que ser Laura Gil, una de las luchadoras del equipo todos los días, la que ejerció de salvadora. Capturó un rebote, metió dos tiros libres y España sobrevivió tras brillar y sufrir de la mano de Megan Gustafson (18) y Leo Rodríguez (17).

Que Puerto Rico no tenga tanta entidad como Serbia o China no implicó un paseo de inicio. El partido, con muy buena asistencia en Lille pese a la hora, empezó ‘bocadillo de piedras’. Hasta una bandeja de Trinity San Antonio en el minuto 2:51 no había una canasta en juego. A España le despertó la héroe del estreno, Leo Rodríguez. Abrió la lata desde el triple, conectó una media distancia y finalizó un pase de fantasía de Mariona Ortiz para abrir gas (4-11, 6′).

España, concentrada

Un triple de Hollingshed sobre la bocina aplacó el parcial, pero todavía habrá más arreón patrio con la aparición constante de Megan Gustafson. Puerto Rico, viviendo en un mar de pérdidas y dependiente de San Antonio en el amanecer del segundo periodo no pudo contener el golpe en la mesa de las de Miguel Méndez. A través de la gran entrada de Paula Ginzo en pista y la dupla Mariona Ortiz-Leo Rodríguez para allanar el camino (14-28, 16′).

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No pasó al terreno de la paliza, porque a ‘PR’ le vino de perlas la irrupción de Tayra Meléndez. Pero España no quiso dar aire. María Araújo abrió el campo y sus dos triples mantuvieron. Leo Rodríguez, cuyo campeonato es estelar, se unió a la viguesa y su 2+1 aportó mucha más tranquilidad al descanso (25-39).

Bueno, pero nada de chorreo. Aunque España estableció su máxima tras triple de Gustafson, Puerto Rico encontró la amenaza exterior de Guirantes para agarrarse y apretar a la selección (35-42, 24′). Y aunque la jugadora nacida en Wisconsin siguió aportando soluciones, Puerto Rico se lo creyó cuando Rosado hizo un triplazo.

Un partido nuevo

Otro partido diferente. Pagan y San Antonio lo apretaron todavía más, España perdió toda su pólvora en ataque y Hollingshed desde la personal igualó el partido antes de la última posesión de cuarto (44-44). Lo más inesperado, un drama tras un cuarto de solo cinco puntos anotados. Había que reaccionar.

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Fue a más todavía. Hollingshed y Rosado devolvieron la ventaja a Puerto Rico en el marcador, otro giro de los acontecimientos (52-50, 33′). Cosa que mantenían, porque el triple no entraba y a la contra Pagan abrió parcial. Leo Rodríguez dio aire con tres tiros libres, pero Guirantes contestó desde lejos (57-53, 36′). La defensa de España hacía aguas.

Necesitaba dureza, que tardó en llegar. E ideas claras. Las tuvo Mariona Ortiz y también Leo Rodríguez tras, por fin, cerrar un aro que parecía piscina para las caribeñas (59-59, 38′). La base del Casademont Zaragoza tuvo la actitud y decisión, y un enorme reverso metió a España al mando por la mínima justo antes del minuto final.

LAPRESSE

El sufrimiento siguió. Porque tras fallos en los dos lados, Puerto Rico golpeó. Hollingshed supo leer a la perfección una jugada final y su reverso superó a todas. Golpe en la mesa, y España con bola y nueve segundos para la conclusión del partido.

España se la fió a Leo Rodríguez, pero no encontró tablero. Laura Gil, milagrosa, cazó el rebote. Se hizo grande, levantó la bola y cayó la falta. Desde el tiro libre, una de las guerreras de la selección anotó y colocó a España al mando y algo más de un segundo. No habría reacción de Puerto Rico. A París con drama y alegría.

Por Berutti

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