Petro de Luanda 78 – 94 Unicaja
El Unicaja cumplió el primer trámite en Singapur y consiguió la victoria ante el Petro de Luanda, (78-94). Los malagueños jugaron un buen partido al que le sobró un último cuarto. Kalinoski y Osetkowski fueron los mejores del equipo del Carpena. El Unicaja mete un pie en la final con este resultado y ya piensa en su duelo de este viernes ante el Al-Riyadi del Líbano. Ibon Navarro dejó fuera de la convocatoria a Yankuba Sima y Killian Tillie.

El Unicaja empezó dejando muy claro que era muy superior en Singapur. Los de Ibon Navarro pisaron el acelerador desde el principio muy metidos en el partido. Kameron Taylor lideraba el primer parcial de 2-12 de los malagueños que iban a tener un idilio con el lanzamiento de tres desde el primer minuto del partido. Los del Carpena eran muy superiores tanto en la parcela física como en la técnica y pronto el marcador empezó a reflejar estas diferencias. El parcial se iba 6-23 para los de la Costa del Sol que se apoyaron en Kendrick Perry y Tyler Kalinoski para irse al primer parón con 19 puntos de ventaja y un 60% de acierto desde la línea de 6,75. El marcador ya estaba roto en los primeros diez minutos, (9-25).
No bajó el nivel del Unicaja. El club de Los Guindos mordía en todas las jugadas y hasta Balcerowski se cargaba de faltas rápidamente, tres en cuatro minutos. Ibon Navarro aprovechaba para rotar y que sus 12 jugadores tuvieran perfectamente repartidas las cargas en este choque. El Petro de Luanda insistía en la defensa en zona, pero era una sangría exagerada. Unicaja metió la directa una vez más con 18 puntos consecutivos en forma de triple. Kalinoski estaba desatado y al juego exterior había que añadir los puntos de Djedovic que también se animaba de lejos. Osetkowski y Tyson Carter remataban la faena y ponían la distancia en casi 30 puntos. Reaccionó algo el cuadro angoleño de Sergio Valdeolmillos. Gerson Domingos y Yanick Moreira recortaron algo las distancias en el marcador. El Unicaja se marchaba al descanso con 75 de valoración y con un electrónico a su favor por 32-55.

El último tramo del partido fue de remar y llegar a la orilla para el Unicaja Osetkowski comenzó de nuevo muy bien el último acto. El californiano anotaba, asistía y se lo pasaba bien en la pista del Singapore Indoor Stadium. Los malagueños se dedicaron a controlar la renta y a pensar en las rotaciones en el duelo de este viernes ante el Al-Riyadi. El Petro de Luanda tiró de amor propio en los minutos finales con Castro y Diabaté maquillando el electrónico hasta el 78-94. El partido se afeó con algo de bronca y con técnica al banquillo cajista y a Djedovic.
G-League United 78 – 65 Quimsa

El primer encuentro tuvo presencia argentina: Quimsa de Santiago del Estero, campeón de la Basketball Champions League Américas, se vio las caras con G-League United, el equipo de la competencia de desarrollo de Estados Unidos. Tras el 16-12 del primer cuarto, Quimsa encontró respuestas con los jugadores de su banco y se puso expectante en el marcador. Pero las imprecisiones, propias del primer partido oficial de la temporada, en el caso de los argentinos con un plantel renovado, volvieron a notarse y con varios minutos sin poder anotar, los estadounidenses aprovecharon para sacar una buena ventaja (24-17) cuando promediaba el cuarto. Estiraron la brecha, que llegó a ser de 11 (33-22), cuando aún restaban 2 minutos para que finalice la primera mitad.

Luego del 33-27 con el cual se marcharon al descanso largo, Quimsa cambió la cara. Las palabras de Leandro Ramella en el vestuario surgieron efecto y el equipo volvió mejor. Empezó a mostrar sus variantes en ofensiva, con la conducción de Juani Brussino, la experiencia de Romano y el peso en el juego interno de Tavario Miller, recortó diferencias y llegó a ponerse abajo por la mínima: 38-37 a 7 minutos para que finalice el período. Pero volvió a aparecer Toscano, acompañado de Brodric Thomas y Charlie Brown para volver a llevar la máxima a 11 (55-44 a 1min25).
Ingresaron al último cuarto con triunfo de la G-League United por 57-49. Los estadounidenses entraron decididos a liquidar el partido para no dejar con vida a Quimsa y evitar una posible reacción. Los argentinos no encontraron cómo hacerle daño a los norteamericanos que hicieron prevalecer el poderío de su juego interno, el cual les generó más de la mitad de los puntos y, de a poco, fueron estirando la brecha y sentenciando el encuentro. El marcador final fue 78-65.