El clásico cordobés comenzó con dominio visitante. En apenas tres minutos, Instituto ya estaba 10 puntos arriba (12-2). Con esa diferencia, la visita se sintió más cómoda en el terreno de juego y se llevó el primer cuarto por 26 a 14. Bautista Lugarini, de la Gloria, fue hasta aquí el goleador con 10 puntos.
El clásico cordobés comenzó con dominio visitante. En apenas tres minutos, Instituto ya estaba 10 puntos arriba (12-2). Con esa diferencia, la visita se sintió más cómoda en el terreno de juego y se llevó el primer cuarto por 26 a 14. Bautista Lugarini, de la Gloria, fue hasta aquí el goleador con 10 puntos. Cuando Atenas conectó en ataque e insinuó ponerse en juego, en el otro costado tuvo respuesta. Gran pasaje de Lee Aaliya con 8 puntos, dos triples y una volcada. Encima que al local le costaba achicar, perdió a Carlos Buemo por doble falta técnica y el banco de suplentes se acortaba aún más, ya que tampoco pudo estar el pívot español Antoni Vicens. Al descanso, Atenas se fue ocho abajo (45-37), bastante bien pensando en todo lo que le costó el juego hasta aquí.
Pasado cinco del tercero, la diferencia en el marcador se mantuvo entre los ocho y once puntos. El Griego no logró ponerse definitivamente en juego. Instituto, pese al recambio y los movimientos del banco, tampoco pudo despegarse. Con mucho amor propio y corazón, Atenas se puso a cuatro (52-48). De ahí al final del cuarto el parcial fue de 14 a 8 para cerrar la visita arriba por 66 a 55. Otra vez hizo el desgaste, luchó, pero se quedó sin nada Atenas. Las ausencias le volvieron a costa más de la cuenta. Instituto nunca dudo de su objetivo y se llevó el triunfo para Alta Córdoba por 87 a 74.
En un encuentro vibrante en el Fortín de Las Morochas, el local buscaba redimirse ante su público tras perder sus dos primeros partidos de la temporada. Por su parte, Peñarol de Mar del Plata llegaba a Junín con la intención de llevarse el triunfo tras una caída en casa frente a Oberá.
En la primera mitad, Argentino mostró un rendimiento impresionante, logrando construir una ventaja significativa en el marcador gracias a la destacada actuación de sus suplentes, Tomás Allende y Jeremías Frontera, quienes aportaron puntos claves y energía al equipo.
Sin embargo, cuando parecía que el local tenía el control del juego, Al Thornton emergió como el referente del Milrayita, comenzando a acortar la distancia con su capacidad ofensiva. El segundo tiempo se desarrolló de manera más equilibrada. Ambos equipos encontraron efectividad en sus jugadas, lo que llevó a un final muy cerrado y emocionante. A pesar de los esfuerzos del dueño de casa por mantenerse en la pelea, el conjunto marplatense logró llevarse la victoria con un ajustado 85-83, gracias al tiro convertido por Lucas Andújar en los segundos finales, dejando al equipo juninense con una dura derrota y sin poder celebrar en casa.
El inicio del partido se tornó muy parejo entre ambos equipos, Forestier y Figueredo fueron los encargados de abrir el marcador para que los riojanos arranquen con un parcial de 5-0 arriba, pero rápidamente Boca se recuperó de la mano de Cuello y Delia, para pasar al frente.
El juego se destacó por el ida y vuelta en ataque, y una gran defensa entre ambos conjuntos. La rotación de los equipos por parte de González y Pérez tomaron protagonismo, la diferencia estuvo en el primer y último cuarto.
De esta manera, el Xeneize volvió a la victoria después de dos derrotas y se llevó un partidazo por 80 a 75 de La Rioja.